Soñar que concede una hipoteca sobre su propiedad, denota que le amenazan trastornos financieros, que le arrojarán a posiciones embarazosas.
Para tomar, o sostener uno, contra otros, es ominoso de la abundancia adecuada para liquidar sus obligaciones.
Encontrarse leyendo o examinando hipotecas, denota grandes posibilidades ante usted de amor o ganancia.
Perder una hipoteca, si no se puede encontrar de nuevo, implica pérdida y preocupación.