Soñar que participa en la Santa Cena, le advierte que renunciará a sus opiniones independientes para conseguir algún deseo frívolo.
Si sueña que no hay ni pan ni vino para la cena, descubrirá que ha sufrido el proselitismo de sus ideas en vano, ya que no está más cerca de su objetivo.
Si se te niega el derecho a la comunión y te sientes digno, hay esperanza de que obtengas alguna posición prominente que ha parecido extremadamente dudosa, ya que tus oponentes son populares y poderosos. Si te sientes indigno, te encontrarás con mucho malestar.
Soñar que está en un cuerpo de bautistas que comulgan, denota que encontrará que sus amigos son cada vez más incómodos, y buscará la armonía con extraños.