Para los agricultores soñar con el diablo, denota cosechas arruinadas y muerte entre el ganado, también enfermedades familiares. Los deportistas deben tener en cuenta este sueño como una advertencia para que tengan cuidado con sus asuntos, ya que es probable que se aventuren más allá de las leyes de su Estado. Para un predicador, este sueño es una prueba innegable de que es excesivamente celoso, y debería abstenerse de adorar a Dios golpeando con su lengua al prójimo.
Soñar que el diablo es una persona grande, vestida de forma imponente, que lleva muchas joyas brillantes en el cuerpo y en las manos, y que trata de persuadirte para que entres en su morada, te advierte que personas sin escrúpulos buscan tu ruina mediante los más ingeniosos halagos. Las mujeres jóvenes e inocentes, deben buscar la fortaleza de los amigos después de este sueño, y evitar las atenciones extrañas, especialmente de los hombres casados. Las mujeres de bajo carácter, son propensas a ser robadas de joyas y dinero por aparentes extraños.
Cuidado con asociarse con el diablo, incluso en sueños. Él es siempre el precursor de la desesperación. Si sueña que le persigue su majestad, caerá en las trampas que le tienden los enemigos disfrazados de amigos. Para un amante, esto denota que será ganado de su lealtad por una libertina.