Soñar que ve a un arzobispo, predice que tendrá muchos obstáculos que resistir en su intento de dominar la fortuna o ascender al honor público. Ver a uno con la vestimenta cotidiana de un ciudadano común, denota que tendrá ayuda y estímulo de quienes ocupan posiciones prominentes y tendrá éxito en sus empresas.
Que una joven sueñe que un arzobispo la dirige amablemente, predice que será afortunada en la formación de sus amistades.